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Las sardinas la brujula número 31 16/20 son pequeñas, delicadas y su intenso sabor las convierte en un manjar muy buscado por sus muchos seguidores. se capturan al amanecer, cuando sus intestinos aún están vacíos. se elaboran a mano pero con especial delicadeza por su pequeño tamaño.
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Las sardinas la brujula nº 31 16/20 son pequeñas, delicadas y su intenso sabor las convierte en un manjar muy buscado por sus muchos seguidores. se capturan al amanecer, cuando sus intestinos aún están vacíos. se elaboran a mano pero con especial delicadeza por su pequeño tamaño.
Ingredientes: Sardinas, aceite de oliva y sal.
Las SARDINILLAS frescas del atlántico se seleccionan por tamaños "pequeño y muy pequeño". Se "empacan" a mano y se tuestan al vapor antes de cubrir con aceite de oliva, para mantener toda su jugosidad.
Sólo compramos pescados y mariscos en campaña y durante las épocas de mayor calidad. Somos especialmente exigentes con el origen de las materias primas utilizando únicamente marisco gallego y pescado del Cantábrico.
Vivimos del mar y por eso mantenemos un estricto compromiso con él: defendemos la pesca sostenible y respetamos las vedas y los límites de captura. Además, cuidamos con esmero, y hasta con mimo, la compra de productos frescos y su transporte desde las lonjas hasta nuestras instalaciones.
Ni cortadoras automáticas ni máquinas empacadoras: conserva artesana y trabajadoras con amplia experiencia profesional. Manos enguantadas que seleccionan tamaños, limpian piezas, las colocan con detalle y pesan lata por lata. Además, limpieza exhaustiva, control de tiempos y de temperaturas para garantizar la calidad.
La más avanzada tecnología al servicio de la calidad de nuestras conservas artesanales. Son máquinas las que pesan el contenido de cada lata o las que controlan tiempos y temperaturas de las cocciones. Y es personal experimentado el que supervisa esa labor.
Esterilizamos a la más baja temperatura posible para así preservar aromas y sabores. Y, por supuesto, realizamos estudios de penetración del calor para garantizar la seguridad alimentaria de nuestros productos y cumplir con la legislación europea y con la de otros países.
No son un recurso. Son una obra de arte. Cada una de nuestras latas, delicadamente elaborada, reúne todas las condiciones para ser el elemento imprescindible de una comida especial. El aprovechamiento de los líquidos de gobierno y el añadido de unos pocos elementos (lima, limón, tomate, patata o pan en diferentes formas) les hará ganar en complejidad siempre que no distorsionen el auténtico sabor de la materia prima. Con ellos, el frescor de los grandes champanes y cavas o de los mejores blancos puede llegar a crear combinaciones sublimes y veladas inolvidables.
